En la ocasión, el edil acordó con el jefe zonal de la empresa de energía mejorar la comunicación entre ambas instituciones, con la finalidad de mantener siempre informada a la ciudadanía sobre cortes o emergencias eléctricas. 

        Una fructífera reunión fue la sostenida entre el alcalde Guillermo Reyes y personeros de Chilquinta, encabezados por el jefe zonal Aconcagua, Manuel Delgado Fernández. En el encuentro fueron tratados diferentes temas que tienen a Putaendo como eje principal de los trabajos de la empresa de suministro eléctrico.

       En efecto, la cita entre ambas entidades se fijó después que el alcalde Guillermo Reyes expresara públicamente la inquietud de vecinos de Piguchén, Población Hidalgo y Lo Vicuña. El 24 de septiembre un corte de energía eléctrica, que duró bastantes horas, tuvo nulas estrategias comunicativas de Chilquinta hacia el municipio. En este sentido, se buscó generar instancias de diálogo.

       “La localidad de Piguchén, donde viven más de 1500 personas, estuvo sin luz por mucho tiempo. Ahí se está ejecutando un proyecto de alcantarillado público y todas las calles de ese sector están abiertas por la construcción del colector de aguas servidas. Eso, en el contexto de un apagón por tantas horas, generaba un riesgo que incluso pudo haber terminado en una desgracia. Eso podría haber sido una complicación adicional para la misma compañía”, contextualizó la máxima autoridad comunal.

       Sin embargo, la inquietud más importante recae en el acceso de la información de los habitantes que pedían al municipio. Como no hubo espacios de comunicación desde Chilquinta, no existía certeza de la reposición del servicio. No era la primera vez que ocurría, puesto que durante el terremoto se vivió una situación similar.

      “Vamos a mejorar la comunicación entre el subgerente y el alcalde, de manera que cuando ocurra algo parecido, él me avise, nos dé un horario que se va a cumplir. El alcalde explicará a través de los medios de comunicación y tranquilizará a la comunidad con la información recibida. La idea es decir que los problemas de suministros de electricidad estarán resueltos a una hora que se debe cumplir”, explicó Guillermo Reyes como una de las medidas resolutivas de la reunión.

     En el encuentro, el alcalde aconsejó a la empresa a mejorar sus estrategias comunicativas con sus clientes. “En el Ministerio de Salud, a través de mensaje de texto, a la gente se le da un mensaje de texto si tiene hora a un doctor o si le fue cambiada o cancelada su citación. Creo que sería eficiente que se enviará información a los vecinos a través de mensaje de texto, al decir los sectores que están sin energía eléctrica, que dejarían de llamar al municipio, a la Línea 600, porque tendría un testimonio formal de su compañía eléctrica”, expresó.

 MENSAJE DE TRANQUILIDAD

        Por su parte, el jefe zonal Aconcagua de Chilquinta, Manuel Delgado Fernández, informó que, actualmente, Putaendo es importante para la empresa. Una de las razones es la ejecución de un proyecto de 300 millones de pesos que permitirá un nuevo conector para la comuna.

       “La inversión es para que cada vez que había un poste chocado, como ocurría hace un par de meses, no quede toda la comuna sin energía. Estamos haciendo otro conectador, para que en caso de que la energía se corte, podamos respaldar por otro sistema a la comuna. Si bien es cierto son ocho mil clientes, para nosotros son ocho mil familias que no podemos dejar de darles energía”, expresó Fernández.

      Desde Chilquinta anunciaron que el corte de energía del pasado 24 de septiembre se debió a la caída de árboles, desde zonas particulares, que dañaron el tendido eléctrico. De esta forma, ya se han invertido 22 millones en una campaña de poda de árboles en toda la comuna.

     “Hemos enviado carta a los clientes para que puedan podar o, de lo que contrario, pedirnos a nosotros que podemos. Esto tiene un costo, pero lo que nosotros hacemos es podar sin marginar nada y traspasar sólo el costo de la poda. Eso conlleva a dos cosas: que los clientes tengan energía y que nosotros no tengamos interrupciones”, explicó el jefe zonal Aconcagua.

    “El mensaje que queremos darles es de tranquilidad. Nosotros estamos trabajando arduamente. Hemos hecho una inversión de casi 300 millones al día de hoy y seguimos haciendo el trabajo de la poda. Llevamos cerca de 22 millones gastados y lo que queremos  es que no se vuelva a sufrir con los cortes de energía cada vez que haya un temporal o un terremoto”, concluyó Delgado.