Según dio a conocer el edil, a varias empresas se les ha negado autorización para extraer material del Río Putaendo, lo que mantendría en un nivel riesgoso el lecho del principal afluente de la comuna.

     Expresando una falta de voluntad política del MOP para manejar de mejor manera la extracción de áridos en la provincia, el alcalde de Putaendo pidió mayor preocupación por el cauce del Río Putaendo en el centro de la comuna.

     El alcalde ha reclamado que en el último tiempo han sido rechazadas cerca de siete peticiones de empresas que han tenido la intención de extraer áridos en el Río Putaendo. Lo anterior provocó que el precio de los áridos en la zona se haya elevado bastante.

      Para el alcalde es una situación que viene de la mano con otra problemática, de las cuales las autoridades del poder central no han sabido actuar.

      “Necesitamos más extracciones porque a la altura del pueblo de Putaendo, en el casco central, está más alto el río en algunos puntos, que la misma ciudad. Una buena forma, ya que la dirección de obras hidráulicas nunca tiene plata para hacer trabajos de encauzamiento importante, es que estas empresas puedan trabajar y ayudar a nivelar el río.  Yo creo que es un tema sensible. Por un lado, la disponibilidad de áridos para la provincia y, lo otro, la seguridad del pueblo de Putaendo”, sostuvo la máxima autoridad comunal.

      La autoridad insiste que en el Río Putaendo no ha existido  sobreexplotación, ni daño al sello del río. Por lo tanto no se explica el que no haya autorización para extracciones. Por otro lado, comparte lo que ha sucedido con multas a empresas que han deteriorado el Río Aconcagua, pero que eso tiene que ver con una “evidente falta de fiscalización del Ministerio”.

     “Yo le he formulado llamados en reiteradas ocasiones a la Gobernación Provincial y a la Seremi de Obras Públicas. Creo que ha faltado una decisión política para hacer estas cosas. Han postulado cerca de siete empresas para extracción de áridos, todas han sido rechazadas por distintas apreciaciones técnicas. Es raro que cinco, seis o siete ingenieros de las empresas que se dedican a esto, además, hagan tan mal los proyectos que son rechazados de plano por la Dirección de Obras Hidráulicas”, explicó el alcalde Guillermo Reyes.

      La preocupación de la autoridad radica en que 40 kilómetros al norte del pueblo existe el embalse Chacrillas que está acumulando agua progresivamente. La comunidad se ha mostrado inquieta en diferentes ocasiones si dicha construcción tiende a sufrir algún daño que genere una emergencia mayor.

    “No hay que confundirse de que harán tres piscinas en el sector de Los Patos y Casablanca, que tienen otra función. Así que para los ejecutivos de Obras Públicas lo que estamos pidiendo es que el río no esté alto. Lo de las piscinas para que el agua pueda ingresar de mejor forma a los APR, es necesario y estoy de acuerdo. No se confunda esos trabajos con que el río en su conjunto está alto y fundamentalmente en la parte más poblada de la comuna”, recalcó el edil putaendino.

      El alcalde apunta en que todo lo anterior se ha traducido en un aumento de precios de los áridos. “Y eso influye en el desarrollo, en la ejecución de obras públicas, en la construcción de viviendas particulares. Todo se hace más caro y más complejo con el precio que tienen los áridos al disminuir la producción de material”, emplazo.

      “Hay una responsabilidad al respecto que pase algo que después podamos lamentar y este municipio, si no encuentra solución en la provincia o en la región, iremos a nivel nacional a hacer el reclamo que corresponde”, concluyó Reyes.