El arte local y emergente tuvo merecido espacio en el escenario para expresar las diferentes inquietudes y exigencias juveniles al cumplirse cuatro meses del “Estallido Social”.

     La Municipalidad de Putaendo, en su compromiso por trabajar junto a agrupaciones sociales y generar instancias participativas, dio sano espacio a diferentes elencos juveniles de música y baile para manifestarse a través del arte y tomarse la Chaya.

      No era para menos. Ayer se cumplieron cuatro meses del llamado “Estallido Social” y el “Carnaval de Todxs” no podía estar ajeno al contexto nacional. Fue una noche donde el arte cumplió su histórico y sublime rol de protesta.

     Todo partió con la hermosa presentación de la Agrupación Raíces de Mi Tierra. Con una tremenda puesta en escena de folclor chileno y latinoamericano, el conjunto logro los aplausos del respetable sin antes denunciar los abusos cometidos en el último tiempo.

   En esta misma lógica se presentó la banda emergente “Lumpen”. Los muchachos agradecieron a la organización del evento el espacio otorgado para hablar sobre las injusticias del país.

    Luego vino el rap de “Gtobeats” que hizo mover la cabeza de los más adolescentes y seguir compartiendo mensajes de consciencia social.

    Por segundo año consecutivo, “Rebenke” volvía a la Chaya. La práctica y el esfuerzo de esta querida banda dio sus frutos porque la calidad en el escenario fue exorbitante. El Rock Campesino hizo reflexivas alusiones hacia la falta de agua, el rechazo a la gran minería en Putaendo y el legado de los ancestros mapuches.

   Para finalizar, la fusión de ritmos de “Latimba” hizo bailar a todos los presentes convirtiendo la jornada en una alegre fiesta.

     Esta jornada participativa fue fruto del trabajo de la Organización de la Chaya con el Colectivo Cultural Queltehue y Agrupación Feminista Las Mimos.

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