Para el edil de Putaendo la modificación administrativa de 1976, que transformó 25 provincias en 13 regiones, no logró generar una descentralización real en el país. “Más bien, agudizó el centralismo y profundizó las inequidades territoriales”, criticó la autoridad comunal.
Respecto a la creación administrativa de la región de Aconcagua, el alcalde de Putaendo, Guillermo Reyes, se sumó al debate argumentando que el proceso de regionalización nunca consolidó su objetivo descentralizador.
“El proceso de modificación administrativa del país, nunca logró generar una descentralización real. La imposición de realidades administrativas con el nombre y número de regiones solo agudizó el centralismo y profundizó las inequidades territoriales y las diferencias identitarias de las provincias”, manifestó el edil de Putaendo.
Para la autoridad comunal, Aconcagua en general posee un admirable aprecio por su cultura patrimonial y un arraigo a sus costumbres, tradiciones e historia. “La identidad aconcagüina no tiene ninguna vinculación con las provincias del borde costero. Es más, Aconcagua tiene su propia economía basada en la minería estatal y en la agricultura exportadora. Somos nosotros quienes generamos la riqueza de la región, que principalmente se gasta en el Gran Valparaíso”, juzgó la autoridad comunal.
“¡Aconcagua no puede seguir siendo el patio trasero de la Quinta Región! Menos aún, considerando que el reciente estudio de factibilidad para ser región, viene a ratificar el consenso ciudadano que Aconcagua fue, es y será una unidad territorial con identidad, historia y cultura propia”, indicó Reyes.
Para el edil de Putaendo, existen argumentos de sobra que reflejan una evidente injusticia en la entrega de recursos que realiza Aconcagua hacia Valparaíso, en comparación con lo que reciben las provincias del interior.
“No es justo y no es equitativo que desde Aconcagua se envíen tantos recursos hacia la costa y no tengamos, por ejemplo, un hospital de especialidades oncológicas en nuestra zona. No son pocos los pacientes con cáncer de nuestras comunas que deben recorrer cientos de kilómetros para su tratamiento, con todas las dificultades que eso significa. Entonces, no tenemos una retribución que permita desarrollarnos en diferentes ámbitos como en salud, educación o urbanismo. Hay una necesidad constante de mayores recursos para Aconcagua y en Valparaíso eso nunca ha sido prioridad”, explicó el alcalde Reyes.
“Región de Aconcagua”, una expresión soberana y mayoritaria de los miles de habitantes de Aconcagua que no renunciarán a su objetivo de ser reconocidos como Región. Así lo piensa el alcalde Guillermo Reyes quien está convencido de que esto se puede resolver con la voluntad de las autoridades locales, participación ciudadana, debate parlamentario y gestiones de Gobierno.
“Una descentralización que entendemos de manera diferente, donde se transfieran competencias no solo a las capitales regionales, sino a las provincias y comunas, para construir un territorio que se desarrolle de manera armónica, justa y democrática. ¡Así queremos la Región de Aconcagua!”, sentenció el jefe comunal.